Ruta por Aigüestortes

Ruta por Aigüestortes i Estany de Sant Maurici

Uno de los mayores tesoros naturales de Cataluña es el Parc Nacional d’Aigüestortes i Estany de Sant Maurici, único Parque Nacional de nuestra comunidad. Se encuentra ubicado en la parte central de los Pirineos, en la provincia de Lleida. La zona protegida del parque ocupa 14.119 ha., pero en total abarca más de 40.000 ha. repartidas por 4 comarcas. Explorarlo entero podría llevar una vida, pero hay 26 rutas de senderismo que facilitan diferentes aproximaciones a sus atractivos. En el blog, por ejemplo, ya hablamos de la Ruta de la Vall de Gerber. En esta ocasión queremos mostraros la zona del Estany de Sant Maurici y los lagos de Amitges en una ruta repleta de estanques, lagunas y magníficas vistas.

Ruta “Cap a les Agulles d’Amitges”

El itinerario “Cap a les Agulles d’Amitges” (hacia Las Agujas de Amitges) es uno de los más populares para conocer el parque. Esta ruta se afronta normalmente desde Espot, pueblo en el que podéis hacer noche. El punto de inicio recomendado es el propio Estany de Sant Maurici, al que se puede llegar en taxi 4×4 desde Espot (7km aprox.). Mucha gente empieza la ruta en el aparcamiento “Prat de Pierró” (a unos 4km del Estany de Sant Maurici), último punto al que se puede llegar con vehículo propio. De esta forma se ahorra dinero, pero se invierte tiempo (y energías) en un tramo no especialmente espectacular. Al final del post tenéis más datos sobre la ruta, así que vamos ya al camino…

Estany de Sant Maurici y Els Encantats

Este es el lago más famoso de Aigüestortes (de hecho, le da nombre) y uno de los que tiene más fácil acceso. Los taxis dejan y recogen a la gente en la caseta de información que hay junto al lago. Sus inmediaciones pueden recorrerse incluso con silla de ruedas mediante una pasarela de 80 metros. Desde este lago, de más de 1.000 metros de largo, parte nuestra ruta hacia las “Agulles d’Amitges”, ubicadas a 1h 45′ a pie. Los que quieran conocer la zona sin hacer demasiado esfuerzo, no obstante, encontrarán varias metas intermedias que pueden ser suficientes para una introducción al parque. Aparte del lago, el gran atractivo en este área son los dos picos llamados “Els Encantats“, de más de 2.700 m. La mejor perspectiva de estas dos agujas y de la brecha que los separa se tiene, sin embargo, desde otros puntos de la ruta. En la segunda foto podéis ver el Estany de Ratera y, al fondo, Els Encantats.

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Cascada de Ratera

A 30 minutos del Estany de Sant Maurici se encuentra la preciosa Cascada de Ratera, que serpentea por la montaña en una caída de unos 100 metros. Desde esta zona ya se tiene una buena perspectiva del lago y “Els Encantats”, así que para los menos exigentes o para los que no puedan permitirse ir más lejos por otras razones, este puede ser el final de una pequeña excursión. El camino hasta ella y las conexiones con otros itinerarios están bien señalizados en todo momento, como es habitual en todo el parque.

Estany de Ratera

El itinerario continúa bordeando el precioso Estany de la Ratera, al que se llega después de una subida relativamente fácil en unos 20/30 minutos desde la cascada. Una vez pasado el lago, los que no se vean en forma tienen dos alternativas: regresar por el mismo camino o desviarse por un sendero a mano izquierda hacia el Mirador de l’Estany de Sant Maurici, ubicado a 1km del lago. Si por mí hubiera sido, seguramente habría optado por alguno de esos dos planes, pero mis compañeros de expedición estaban más animados, así que continuamos ascendiendo por un tramo de nivel “moderado” hacia el siguiente checkpoint. Antes de iniciar la subida, eso sí, fijaos bien en la montaña, ya que es una zona donde podríais encontrar marmotas. Nosotros vimos alguna correr a lo lejos… creo.

Refugio d’Amitges

Tras una cansada subida de unos 45 minutos, se alcanza el Refugi d’Amitges, ubicado a 2.380 metros de altura. En su bar-restaurante podréis reponer fuerzas, aunque no esperéis precios populares (algo comprensible, por otra parte). Si pensáis hacer alguna ruta más larga, allí podréis pasar la noche por unos 17€. Para senderistas tan amateurs como nosotros, llegar hasta el refugio parece una hazaña comparable a subir el Everest, así que da un poco de rabia comprobar que algunos suben hasta allí en los taxis 4×4. Sea como sea, las vistas sobre el valle recompensan el esfuerzo (foto inferior y tercera foto del post).

Estany d’Amitges y Agulles d’Amitges

A pocos pasos del refugio se encuentra el Estany d’Amitges, punto final del itinerario “Cap a les Agulles d’Amitges”. El nombre de esta ruta viene dado por las dos agujas (agulles en catalán) que sobresalen tras el lago. La llamada “Agulla Gran d’Amitges” se eleva hasta los 2.662 m. Después de disfrutar de la panorámica se puede continuar hasta otros dos estanques muy cercanos, elEstany de la Munyidera y el Estany dels Barbs, ya sea por el camino central o bordeando entre las rocas el Estany d’Amitges. Tras explorar bien la zona se plantea la cuestión del regreso. Mis compañeros, nuevamente, decidieron alargar la ruta, así que en vez de deshacer todo el camino, volvimos hasta la subida del refugio, donde conectamos con un sendero de 1km que dirigía al Estany de les Obagues de Ratera.

Estany de les Obagues de Ratera

Si bien no forma parte del itinerario “oficial”, reconozco que fue un acierto caminar hasta allí, ya que es quizá el lago más fotogénico del conjunto y el sendero permite disfrutarlo desde la lejanía a medida que se va bajando hacia él. En uno de los riachuelos que lo abastece aprovechamos para mojar un poco los pies e ingerir alimento. Conviene recordar, por cierto, que está prohibido bañarse en todo el parque. Y, como es obvio, no hay que dejar ningún tipo de residuo u otras marcas de vuestro paso por allí.

Mirador de l’Estany

Nuestro camino continuó otros 800 m. en una cómoda bajada junto al río hasta el Mirador de l’Estany (aquel que habíamos descartado en la subida). Desde este punto se tienen, como es obvio, unas inmejorables vistas sobre el Estany de Sant Maurici y Els Encantats. El regreso al punto de partida puede hacerse deshaciendo el camino hasta el Estany de Ratera o empalmando con el itinerario de “El Mirador de l’Estany de Sant Maurici“, consistente en dar la vuelta al lago. Por supuesto, mis compañeros eligieron, una vez más, el camino más largo, así que continuamos atravesando el barranco del Pico del Portarró para acabar encontrando, al fin, el sendero de regreso al Estany de Sant Maurici. Este último tramo (quizá por el cansancio) no me pareció el más espectacular, pero era la mejor forma de rematar una gran ruta por Aigüestortes.

Ficha técnica de la ruta e información adicional

• Ruta: “Hacia las Agulles d’Amitges” + “El Mirador de l’Estany de Sant Maurici”
• Tipo: a pie, ruta circular
• Distancia total: 12,32km (circular, empalmando las 2 rutas)
  • Sólo ruta “Hacia las Agulles d’Amitges”: 9,16km (ida y vuelta)
  • Sólo ruta “El mirador de l’Estany de Sant Maurici”: 8,8km (circular)
• Duración total: 5h 15′ (+ descansos)
• Dificultad: moderada (Zonas con ascensos bastante pronunciados a partir del Estany de Ratera hasta el Refugio d’Amitges. Varias zonas muy pedregosas a lo largo del recorrido)
• Altitud mínima/máxima: 1909 m. – 2377 m.
• Desnivel: 459 m.
• Época recomendada: junio – octubre
• Punto de partida: lo ideal es partir desde el Estany de Sant Maurici, donde hay una parada de taxis 4×4. Si se deja el coche en el aparcamiento del Prat de Pierró y se decide empezar a caminar desde ahí, hay que añadir unos 50 minutos por trayecto.
• Tracks/mapas: GenCat.cat | Nuestra ruta en Endomondo (4 partes) | Google Maps personalizado
• Más detalles y todos los itinerarios en Aigüestortes: Red de Parques Nacionales
• Alojamiento:
  • Lista de los campings en la zona. Nosotros estuvimos en Voraparc, cerca de Espot, y nos pareció perfecto. Especialmente aconsejable para descubrir esta zona. Tiene restaurante y los taxis que suben al Estany de Sant Maurici pueden parar delante sin coste extra.
  • Otros alojamientos en: Esterri d’Àneu | Espot

Palacio de Rundale,

Palacio de Rundale, visita imprescindible en Letonia

Letonia es uno de esos países de los que la mayoría de viajeros tenemos pocas referencias, como ocurre con Lituania y Estonia. Las llamadas “Repúblicas Bálticas”, sin embargo, albergan gran cantidad de tesoros, como pudimos comprobar durante nuestra ruta por los Países Bálticos. En este post os queremos hablar del bellísimo Palacio de Rundāle, todo un clásico del turismo en Letonia. Si estáis preparando un viaje por estos países, el Rundāles pils no debería faltar en vuestro plan. Como comprobaréis a continuación, es una pequeña gran joya del arte barroco y rococó.

Breve historia del Palacio de Rundale

En 1735, Ernst Johann von Biron, duque de Curlandia y Semigalia, adquirió unos terrenos en Rundāle, por entonces parte del Imperio Ruso. Allí, en 1736, mandó construir su palacio de verano, cuyo diseño correría a cargo de Bartolomeo Rastrelli. El proyecto pudo ser abandonado en 1740, cuando el duque fue condenado al exilio a Siberia, pero 22 años más tarde recibió el perdón y en 1768 pudo acabar su palacio. Diferentes familias nobles, como los Zubovs o los Shuvalovs, residieron en Rundāle hasta la I Guerra Mundial, cuando el edificio fue usado como hospital y cuartel general. Entre 1920 y 1978 el palacio albergó una escuela local, aunque en 1972 ya se había establecido el Palacio-Museo de Rundāle y se había iniciado un larguísimo proceso de restauración que a fecha de hoy no ha terminado por completo.

Visita al Palacio de Rundale

El complejo palaciego de Rundāle, que ocupa un área total de 72 ha., está ubicado a 80km al sur de Riga, muy cerca de la frontera entre Letonia y Lituania. De hecho, su emplazamiento lo hace ideal para ser visitado en una ruta hacia/desde este último país. Dejaremos los datos prácticos sobre precios, horarios y cómo llegar al final del post, así que vamos ya con la visita a sus dos zonas: el interior y los jardines, a los que se puede acceder por separado o con ticket combinado.

Interior del Palacio de Rundale

Una de las cosas que puede sorprender y/o molestar en Rundāle es la variedad de tickets que existen y los “extras”. La visita al interior, por ejemplo, está divida en ruta corta y ruta larga. Además, cobran suplemento por algunas exhibiciones y por hacer fotos. Nosotros pasamos por el aro y acabamos pagando un ticket combinado de ruta larga + jardines + derecho a foto. Por fortuna, cuando uno empieza a ver los magníficos salones y aposentos se le va olvidando la sensación de haber sido “saqueado”.

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Tanto en la ruta larga como en la corta se visita primero un ala del palacio llena de salas destinadas a recepción de invitados, bailes y otras festividades. El Salón Dorado (foto superior) y el Salón Blanco (foto inferior) son las más grandes e imponentes de esta zona y de todo el complejo. En cada estancia encontraréis folletos explicativos que os aportarán detalles sobre el uso que se le daba a cada una y sus elementos artísticos más destacados (en inglés).

En la zona central del palacio se visitan las habitaciones del Duque, salvo las privadas, que sólo pueden visitarse con el ticket de la ruta larga. De las 10 habitaciones que pueden verse en la ruta corta destacaríamos la Habitación Rosa, dedicada a la diosa Flora, el Dormitorio del Duque, con una enorme cama en el centro, la Sala del Billar o el Salón de Mármol, que sirvió como comedor del Duque.

La ruta larga consiste en añadir otras 15 habitaciones al recorrido, 5 de ellas correspondientes a las habitaciones privadas del Duque y otras 10 pertenecientes a la Duquesa (estas últimas en otra ala). La verdad es que merece la pena pagar por el recorrido largo, ya que algunas de las habitaciones más bonitas y más profusamente decoradas se encuentran en estas zonas, como elBaño de la Duquesa o el Dormitorio de la Duquesa.

Jardines del Palacio de Rundale

A los jardines de Rundale se puede entrar con el ticket combinado para las dos rutas o de forma independiente. También os recomendamos añadirlos a vuestra visita ya que, además de tener acceso a una gigantesca área de preciosos jardines, donde sobresalen el Jardín Francés y elJardín de Rosas, podréis aprovechar para descansar a la sombra, dar un relajado paseo entre árboles y sacar las mejores fotografías de la fachada del palacio. De hecho, hasta podréis subirlas a internet, porque allí hay cobertura de Wi-Fi gratis.

Información práctica para visitar el Palacio de Rundale

• Ubicación: Rundāles pils, Municipio de Rundāle, Letonia (Google Maps)
• Cómo llegar:
  • Vehículo propio. El Palacio se encuentra en la carretera P103, flanqueada por dos carreteras principales: la E67 al Este y la A8 al Oeste. Si venís de Riga o del sur (Kaunas/Vilnius) la opción más adecuada sería la de llegar a Baukas por la E67 y allí girar al Oeste hacia el palacio (a unos 12km). Si venís de ver la Colina de las Cruces (Siauliai, Lituania) entonces deberíais tomar la A-12 (luego A-8) hacia Jelgava-Riga y en Eleja conectar al Este con la P103 (25km). En los alrededores del palacio hay al menos 2 parkings gratuitos.
  • Bus. Desde Riga se puede llegar a Bauska en bus (1h 10′, 3€), y desde ahí tomar otro bus hasta Rundāles Pils (20′, 0,90€). En esta web tenéis información detallada sobre trayectos de bus en Letonia.
  • Vuelos. Las ciudades más cercanas con aeropuerto internacional son: Riga (87 km), Kaunas (208 km), Vilnius (245 km) y Palanga (233 km).
    • Comprobar precios y horarios de vuelos.
• Horarios:
  • Abierto todos los días del año.
  • Horario de apertura: 10:00h
  • Horarios de cierre:
    • Museo (interior): de mayo a octubre hasta las 18:00h. Resto del año hasta las 17:00h
    • Jardines: de junio a septiembre hasta las 19:00h. Mayo y octubre hasta las 18:00h. Resto del año hasta las 17:00h. Además, los viernes, sábados y domingos de verano (jun-ago) los jardines abren hasta las 21:00h.
    • Taquillas: como norma general, cierran 30 minutos antes que el museo. Para ir tranquilos recomendamos llegar al menos 1 hora antes del cierre.
    • Ver horarios detallados en la web oficial.
• Precios:
  • Adulto ruta corta: 4€
  • Adulto ruta larga: 6€
  • Jardines en verano: 4€
  • Ticket combinado ruta larga + jardines en verano: 9€
  • Ticket combinado ruta corta + jardines en verano: 7,50€
  • Permiso para hacer fotografías: 2€
  • Ver precios detallados en la web oficial (incluye descuentos, exhibiciones, etc.)
• Web oficial: Rundāle.net | tour virtual
• Dónde dormir:
  • Nosotros veníamos del sur, de ver la Colina de las Cruces, y tras visitar el palacio dormimos en Bauska, en el Hotel Berzkalni. Por 45€ tuvimos una habitación doble enorme (más parecida a un apartamento), con baño amplio, parking gratis y wifi gratis. Un hotel más que decente para hacer noche, aunque la piscina estaba cerrada…

Istria (Croacia)

Qué visitar en Istria (Croacia)

Istria (Istra en croata) es una península y un condado situado en el norte de Croacia. Visitamos esta región en nuestro viaje por los Balcanes y siempre la recordamos como la zona que más nos gustó de Croacia. Aunque ni mucho menos está libre de turismo, en Istria se respira algo más de calma que en el sur y también ofrece una buena cantidad de atractivos, desde ciudades con impresionantes centros históricos hasta playas solitarias con aguas cristalinas. A continuación os presentamos algunos de los mejores lugares que visitar en Istria en nuestra humilde opinión.

Rovinj

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Rovinj es una de las ciudades más encantadoras no solo de Istria, sino de toda Croacia. Ubicada sobre una pequeña península, Rovinj no tiene grandes atractivos a nivel de patrimonio, pero sus callejuelas -que suben, bajan y serpentean por doquier-, su ambiente de pueblo pesquero y su animada vida en plazas y bares, la convierten en una visita obligada de Istria. No hay que perderse la Basílica de Santa Eufemia, especialmente por las vistas sobre el Mar Adriático y las islas cercanas.

Porec

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El casco antiguo de Porec también ofrece un buen número de preciosas callejuelas por las que perderse, aunque es más ordenadito y totalmente plano. Al igual que en Rovinj, buena parte del entramado urbano de Porec está completamente rodeado por el Adriatico, haciendo que uno disfrute a cada paso de la brisa marina tan apetecible en verano. Pero quizá el mayor reclamo turístico de Porec es su Basílica Eufrasiana, inscrita en el Patriomonio de la Humanidad. Los mosaicos que alberga son considerados una de las mayores obras maestras del arte bizantino. No hay que perderse la visita al interior, así como las vistas desde su campanario.

Pula

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Pula es la pequeña Roma de Croacia. La ciudad en sí quizá no sea la más bella de Istria, pero su legado romano compensa sobradamente cualquier otra carencia. En Pula podréis ver un enorme anfiteatro del s.I, hermano pequeño del Coliseo de Roma, así como un arco del triunfo (Arco de los Sergios) o el fotogénico Templo de Augusto, que recuerda a la famosa Maison Carrée de Nîmes, Francia. En definitiva, una visita 100% cultural, que puede complementarse con una excursión a la isla de Brijuni, donde se encuentra el Brijuni National Park.

Pueblos de Istria

Estamos seguros de que Istria esconde un buen número de pueblos y pequeñas ciudades olvidadas por el turismo o muy poco frecuentadas por extranjeros. Nuestra primera parada en Croacia, por ejemplo, fue en Novigrad, una pequeña localidad de poco más de 4.000 habitantes donde pudimos pasear y bañarnos en un ambiente tranquilo y familiar. Y mucho más solitario aún resultó ser Bale, un encantador pueblo con preciosas calles adoquinadas donde nos recibieron -en plenas fiestas locales- con enorme amabilidad. Os animamos a descubrir vuestros propios rincones secretos.

Playas de Istria

Aunque no somos muy fanáticos de las playas, las cristalinas aguas del Adriático nos invitaron al baño en más de una ocasión y más de dos. La costa de Istria, por lo general, no alberga grandes playas de arena. Más bien se trata de un litoral agreste, con muchas zonas de rocas y vegetación en primera línea de mar. Esto es lo que nos atrajo a nosotros y, por ello, no podemos recomendar ninguna playa en especial. Cualquier tramo de carretera era bueno para parar y bañarse. Os sugerimos leer este post, donde Roser, del blog SempreViaggiando, os da muchos detalles y sugerencias.

Naturaleza en Istria

A nivel de naturaleza, el Brijuni National Park es quizá lo más destacado de Istria. No pudimos ir por falta de tiempo, así que no podemos decir mucho sobre él, salvo que nos quedamos con las ganas. Se puede pagar por una excursión organizada (unos 30€/persona, con varias visitas incluidas) o por libre. Lo que sí visitamos fue el Abismo de Pazin, una enorme brecha en la tierra con enormes paredes de roca kárstica. Quizá no merece la pena hacer el viaje hasta allí si no viene de paso en vuestra ruta y sólo queréis curiosear, ya que lo que permiten recorrer por libre no deja de ser una bajada y una subida por un pequeño valle (algo bastante cansado, por cierto). Sin embargo, tenemos entendido que se pueden contratar visitas espeleológicas a las cuevas que se forman en el interior. Aquí os dejamos la web, por si os animáis a indagarlo. También pudimos visitar otro bello paisaje kárstico en el Učka Nature Park, donde contemplamos en la más absoluta soledad las caprichosas formas del cañón Vela Draga.

Qué visitar en Istria (mapa)

RUMANIA

Viajar a Rumanía: qué ver, ruta y presupuesto

Hace escasos días regresamos de nuestro viaje por Rumanía, donde hemos pasado casi 3 semanas. Volvemos encantados y con ganas de animar a otros viajeros a que visiten este precioso y semi-desconocido país. El turismo aún no ha llegado de forma masiva, así que aún es buen momento para descubrir la Rumanía más auténtica. Pero que nadie se engañe: las agencias de viajes ya hace tiempo que explotan el filón de “Drácula”, así que Rumanía ofrece fuertes contrastes entre remotas zonas rurales olvidadas por los extranjeros y ciudades de postal donde los grupos de turistas luchan por la mejor foto y regatean por souvenirs de vampiros. Cada región tiene su encanto y, en conjunto, resulta un país muy estimulante y variado. A continuación encontraréis información práctica e inspiración para preparar vuestro propio viaje a Rumanía.

Qué ver en Rumanía

Quienes no estén familiarizados con Rumanía no tendrán demasiadas referencias visuales de este país. Como mucho, les vendrá a la cabeza algún castillo de Transilvania relacionado con el famoso Vlad “El Empalador”, personaje histórico en el que -vagamente- se inspiró Bram Stoker para crear el mítico “Drácula”. Es cierto; se puede visitar un castillo que popularmente es conocido como el “Castillo de Drácula”, aunque poco o nada tiene que ver con Vlad Tepes. Sea como fuere, quienes decidan viajar a Rumanía verán que es tierra de castillos, sí, pero también de extraordinarias iglesias, ciudades amuralladas, pueblos con curiosas tradiciones, praderas bucólicas, bosques frondosos, excéntricas construcciones de la etapa comunista, carreteras imposibles, etc. Aquí os resumimos lo que a nosotros nos pareció imprescindible:

• Castillo de Hunedoara (poco conocido, pero quizá el más espectacular desde el exterior)
• Sighisoara (ciudad medieval amurallada, cuna de Vlad Tepes)
• Sibiu (con su precioso casco antiguo y sus enormes plazas)
• Mina de sal de Turda (un curioso parque de atracciones bajo tierra)
• Iglesias de madera de los Maramures (protegidos por la UNESCO, en un entorno rural bucólico)
• Cementerio de Sapanta (o “Cementerio Alegre”, probablemente el cementerio más llamativo del mundo)
• Monasterios pintados de Bucovina (protegidos por la UNESCO, simplemente ¡maravillosos!)
• Reserva de osos de Zarnesti (con más de 80 osos rescatados de condiciones dramáticas)
• Iglesias fortificadas sajonas (iglesias amuralladas y con torres de defensa, también protegidas por la UNESCO)
• Castillo de Peles (impresionante por dentro y por fuera)
• Castillo de Bran (o “Castillo de Drácula”, el más famoso de todos, aunque no necesariamente el más bello ni en su exterior ni en su interior)
• Fortaleza de Rasnov (medio en ruinas, pero con una esmerada atmósfera medieval)
• Brasov (la ciudad más turística de Rumanía, buena base para las 4 visitas anteriores y con mucho encanto en su casco antiguo)
• Carretera Transfagarasan (una de las rutas más espectaculares del mundo)
• Ruinas de la Fortaleza de Poenari (el verdadero castillo de Vlad Tepes, olvidado por la mayoría de turistas)
• Bucarest (también olvidada por el turismo, pero con un icono imprescindible: el Parlamento, segundo edificio más grande del mundo)

Obviamente, hubo muchos lugares que no visitamos y de los que no podemos tener opinión, como Timisoara, Targu Mures, Alba Iulia o toda la zona del Mar Negro, incluyendo la turística Constanta o el Delta del Danubio. Y también visitamos lugares que, teniendo su encanto, no consideraríamos “imprescindibles”, como Cluj-Napoca, Deva, el cañón del río Bicaz, el cercano Lago Rojo, el curioso tren de vapor de Viseu de Sus o la interesante cárcel-museo de Sighetu.

De todos estos lugares hablaremos en detalle en el futuro, así que atentos a las actualizaciones del blog y de este post, que servirá de “punto de encuentro”.

Ruta por Rumanía

Nuestra ruta por Rumanía fue un tanto peculiar, ya que llegamos en tren desde Austria y volvimos en avión desde Bucarest. Además, nos movimos la primera semana en tren para aprovechar el billete Interrail con el que estábamos viajando, alquilamos un coche la segunda semana para recorrer zonas rurales y dejamos los últimos días para explorar Bucarest a pata o en transporte público. Así pues, aunque no os podemos recomendar que sigáis nuestros pasos, sí que podéis tomar apuntes para moldear la ruta a vuestro gusto y añadir/quitar según el tiempo del que dispongáis. Si hacéis click sobre los marcadores rojos podréis desplegar detalles sobre visitas.

La zona más turística, para que os ubiquéis, sería la formada por el triángulo Brasov – Sighisoara – Sibiu, todas ellas en Transilvania, el corazón de Rumanía. Si tenéis poco tiempo (digamos una semana o menos) y queréis ver lo más popular, moverse por ahí sería lo más inteligente. Las distancias en Rumanía se hacen muy largas y pretender ampliar el círculo puede ser una tarea complicada. Para hacer un “circuito” de este tipo lo normal es llegar en avión a Bucarest o Cluj-Napoca, alquilar allí un coche y hacer una ruta circular desde una de ellas o bien devolver el coche en la otra. Si tenéis tiempo para ampliar la ruta, podéis hacer una especie de “U” hacia el norte para incluir los Monasterios pintados de Bucovina y las Iglesias de Madera y otros encantos rurales de Maramures. Por cierto, cruzar la carretera Transfagarasan os llevará unas 3 horas de conducción, sin contar las paradas. La podéis incluir en vuestra ruta por placer (lo recomendamos encarecidamente), pero hay caminos más rápidos sea cual sea vuestro destino.

Presupuesto para viajar a Rumanía

Rumanía es un país barato para el turista español. Mientras en 2015 el salario mínimo interprofesional en España es de 757€, en Rumanía es de 218€, uno de los más bajos de la UE. A la hora de viajar, esto se nota especialmente en los precios de la comida, el alojamiento, el transporte público, las entradas a monumentos, etc. Salvo el alquiler del coche y el combustible, todo nos resultó mucho más económico que en España. A continuación intentaremos hacer un desglose que os pueda servir como orientación para estimar vuestro presupuesto diario o total.

Comida

Comer y cenar cada día en restaurantes de Rumanía no supone un gran trauma para el bolsillo. En los lugares más baratos comimos por 4€/persona y en los más caros salimos a 12€/persona, casi siempre a la carta. Se puede comer aún más barato si sólo se pide 1 plato (nosotros solíamos pedir sopa + plato principal, sin postre), si se cocina algo del supermercado o si uno se alimenta a base de bocadillos, trozos de pizza, etc. También se puede comer más caro si se va a los mejores restaurantes y se piden platos a la carta y se incluye vino, postres, cafés y demás. Aún así, hay que esforzarse para superar los 20€/persona. Buena parte de los desayunos están incluidos en el precio de los alojamientos, pero digamos que se puede desayunar por 2€ o menos al día. Pongamos, en total, una media de 15€/persona al día para comida.

Transporte

El transporte público en Rumanía es extremadamente barato, aunque también es extremadamente deficiente en algunas zonas. El tren, especialmente, tiene la peor de las consideraciones entre los propios rumanos: lento hasta desesperar, caluroso, agobiante, viejo… Aún así, tomamos algún tren con aire acondicionado y relativamente nuevo, o sea que puede ser útil en determinados trayectos. El bus es una opción mucho más eficiente, con mayor regularidad y muy barato. No obstante, el mejor modo de moverse por Rumanía es, sin duda, el coche, así que nos centraremos en eso para los cálculos. Nosotros alquilamos en rentalcars.com un Renault Clio de Avis. Hay más modelos y más compañías, con precios que varían desde 25€/día hasta 35€/día en la gama baja, según el punto de retirada y el de devolución (si es distinto hay que sumar un recargo). Tomaremos, pues, una media de 30€/día para el coche de alquiler, que es exactamente lo que pagamos nosotros. A esto habría que añadir unos 45€ para llenar 1 depósito, como mínimo. Si insistís en tomar trenes y buses, quizá con 5€/día para transporte público sería más que suficiente.

Alojamiento

Por toda Rumanía hay una buena oferta de alojamientos baratos. Por la carretera se ven multitud de carteles de “pensiunea” o “cazare” (alojamiento) con precios que oscilan entre 15€ y 30€ por una habitación doble con desayuno. Los hoteles pueden ser un poco más caros, pero en general se duerme bastante bien por 35€, con aire acondicionado, desayuno y baño privado. El tema del aire acondicionado puede ser imprescindible en verano y muchos alojamientos carecen de él. Nosotros reservábamos casi todo con 1 día de antelación en Booking para poder elegir las condiciones, zona, etc. Pagamos una media de 15€/persona y noche en habitación doble. Durmiendo en hostels se pueden pagar unos 10€ de media por una cama en habitación compartida. Si subimos a 20€/30€ por persona ya podemos irnos a un 4 estrellas. La zona donde hay que tener más cautela con precios y disponibilidad de habitaciones es en Brasov. Fue uno de los pocos lugares donde llegamos sin reserva y lo pagamos “caro”.

Entradas a museos, castillos, etc.

Los tickets para entrar a la mayoría de atracciones turísticas de Rumanía son extrañamente baratos. En ocasiones nos asombrábamos de que no hayan explotado más el tirón de Drácula o la etiqueta “Patrimonio de la Humanidad” que distingue a muchas de sus iglesias, donde el billete solía valer menos de 1€ o la voluntad. Pero lo más desconcertante era el precio a pagar por el “derecho a foto”, que en la mayoría de ocasiones era tan caro como la entrada o incluso más. Así pues, se podía dar el caso de que visitar un castillo costara 2€ y el derecho a foto valiese 4€. El lugar donde más pagamos, con diferencia, fue en el Castillo de Peles, donde soltamos 16€ cada uno, incluyendo, eso sí, 1 audioguía, el derecho a foto y la opción del recorrido “largo”. El Castillo “de Drácula”, en Bran, costaba menos de 7€ (sin cargo por hacer fotos) y el resto de atracciones del país eran casi todas mucho más baratas. Pongamos una media de 5€/persona al día, aunque depende mucho de la zona que visitéis y cuántas cosas queráis ver.

Presupuesto total para viajar a Rumanía

Teniendo en cuenta las cifras anteriores y algunas otras que no hemos mencionado, vamos a intentar orientaros sobre el presupuesto total por persona necesario para viajar a Rumanía por libre una semana, dos semanas o tres semanas. Como es lógico, son cifras aproximadas, sólo útiles para ser tomadas como referencia. Seguro que podéis hacer un viaje mucho más barato… y también mucho más caro.

Concepto	1 semana	2 semanas	3 semanas
Vuelo ida y vuelta*	150 €	150 €	150 €
Coche de alquiler + gasolina **	125 €	250 €	375 €
Alojamiento (por persona, en hab. doble)	105 €	210 €	315 €
Comidas	105 €	210 €	315 €
Visitas	35 €	70 €	105 €
Otros (buses locales, parkings, propinas, etc.)	35 €	70 €	105 €
TOTAL por persona	555 €	960 €	1.365 €

* Los precios de los vuelos varían mucho según el aeropuerto de origen y de llegada, ya que hay vuelos low-cost de Ryanair o WizzAir que pueden salir por menos de 100€ y vuelos de compañías tradicionales que rondan los 200€. Cluj-Napoca y Bucarest son los principales aeropuertos de referencia.

** El resultado de las casillas es el total del alquiler del coche + 1 depósito a la semana dividido entre 2 personas, dando por hecho que sois 2 viajeros compartiendo gastos a mitad y que el coche se devuelve en el mismo punto donde se recoge.

Fotos: (1) Castillo Corvinilor en Hunedoara (2) Monasterio pintado de Sucevita en Bucovina (3) Comida tradicional rumana, con la polenta como protagonista (4) Carretera Transfagarasan desde el Lago Balcea (5) Castillo de Peles en Sinaia. Autoría: Lupe/Los apuntes del viajero.